Víctor Malagón10 de juny del 2025

El eForum eMallorca Experience 2025 arrancó este martes con la intención de profundizar en la transformación sostenible y con el deseo de proporcionar herramientas para «tomar buenas decisiones hoy», según planteó Paula Serra, directora general de Audiovisuales del Grup Serra. A lo largo de dos días, una veintena de expertos analizan los retos que plantea el cambio climático, la sostenibilidad energética, la transformación de las ciudades o la construcción.

El primero en tomar la palabra fue el alcalde de Palma, Jaime Martínez, encargado de inaugurar las jornadas. Apuntó a su compromiso de avanzar hacia una «ciudad verde e inteligente».

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El alcalde de Palma, Jaime Martínez, ojea el especial del eForum junto a la presidenta del Grup Serra, Carmen Serra, este martes.

Señaló al Palma Cultural Innovation Bay como la herramienta para desarrollar también la sostenibilidad desde la colaboración pública y privada y avanzar en la economía azul. Después tomaron la palabra los diferentes expertos.

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María García de la Fuente.

María García de la Fuente
PERIODISTA
La presidenta de la Asociación de Periodistas de Información Ambiental, condujo la sesión y antes advirtió: «Vivimos ya en la era del cambio climático. Lo que nos ha sorprendido es que hace dos décadas informábamos sobre él y pensábamos que no lo íbamos a vivir en primera persona. Nos ha sorprendido lo pronto que ha llegado». Ante esa nueva realidad, De la Fuente reflexionó: «Es necesario estar informados para tomar decisiones». Esas decisiones en torno al clima se toman en cada momento por cada ciudadano, con cada compra, con la decisión de cómo ir a trabajar o con qué comer. «Se necesita información veraz y contrastada» y defendió el papel del periodismo especializado: No vale que pongamos el micrófono a cualquiera».

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Álvaro Rodríguez.

Álvaro Rodríguez
THE CLIMATE REALITY PROJECT
El representante en España de la organización creada por el exvicepresidente de EEUU Al Gore, arrancó con dureza. «No hay plan b. En dos millones de años, la Tierra no ha tenido tal concentración de CO2 y se debe a que hemos decidido apoyar nuestro desarrollo en la quema de combustibles. Enviamos 175 millones de toneladas de carbono cada día a la atmósfera», señaló y añadió, lapidario: «El cambio climático no es política ni economía, es física». Repasó datos: 2024 ha sido el año más caluroso; el verano ha aumentado cinco semanas, en este siglo habrá mil millones de migrantes climáticos que huirán de zonas no habitables; la temperatura del Mediterráneo provoca catástrofes. Recordó que la de 2023 ha sido el evento climático que más dinero ha costado a España. «Hay sucesos meteorológicos que están arrasando con todo», dijo. «Estamos viviendo una crisis a nivel global y no somos conscientes». Reclama: «Hay que cambiar de fase y crear un nuevo modelo porque nos va la vida en ello. Tenemos las herramientas para reducir las emisiones. Podemos pasar a la historia como los que salvaron a la Humanidad». Apunta a que todavía estamos a tiempo: «En el momento en que dejemos de emitir gases de efecto invernadero la temperatura dejará de subir y en unas décadas ese CO2 habría sido reabsorbido».

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Enrique Morán

Enrique Morán
PROFESOR DE GEOGRAFÍA DE LA UIB
El profesor Enrique Morán habló de la amenaza de desertificación de Balears, «la amenaza silenciosa». Recordó que la pérdida del suelo de «su capacidad para producir vida» por cambios climáticos o por la acción humana es algo muy complicado de revertir. También que el fenómeno no tiene porqué acabar en un desierto como el Sáhara sino en un empeoramiento de la fertilidad. La superficie árida en la Tierra ha crecido un 70 por ciento en las últimas décadas por distintos efectos: más temperatura del aire, «cuanto más caliente más sediento está» y un desplazamiento de la aridez del norte de África hacia el Mediterráneo. Entre los factores humanos que lo explican apuntó que a las Illes Balears los que más le afectan son la presión urbana y turística. Con todo, sobre las Islas dice que por ahora la situación es «agridulce». Mientras Menorca y el norte de Mallorca tienden a un clima más húmedo, sí hay un incremento de aridez en Formentera y en Eivissa. Apuntó a que hay que prestar atención a los cambios de uso del suelo, con un crecimiento de la superficie urbana y de la forestal. «Consumen más agua». Y otra, en torno a los acuíferos, de los que sale el 75 por ciento del agua que se emplea en las Islas. Morán apuntó que están en un «estado bastante malo» por la presencia de contaminación y por una explotación intensiva que les impide recuperarse. «Estamos haciendo algo mal». Otro factor en contra es que las previsiones son que la disponibilidad de agua va a descender un 40 % en el Mediterráneo. «Hasta la fecha, el suelo no se está aridificando pero los modelos nos indican que sí será así en el futuro».

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Mercedes Ballesteros

Mercedes Ballesteros
CIEMAT
La directora del Departamento de Energía del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), Mercedes Ballesteros, abordó la posibilidad de una energía limpia y segura. «Los datos son tozudos, casi el 50 por ciento de la energía que consumimos en España sigue siendo fósil», apuntó, una cifra que baja en la producción de electricidad. Ballesteros recordó que tanto los acuerdos adoptados por la UE como la legislación estatal marcan que en 2030, las renovables tendrán que suponer el 48 % de la energía y un cien por cien en 2050. Eso supone multiplicar por cinco la producción en quince años. «También es una cuestión económica. Es la manera más barata de producir energía y nos hace reducir nuestra dependencia del exterior». De todo el déficit comercial español, un 70 % responde a la compra de energía. A las renovables sumó otras posibilidades: biocombustibles o hidrógeno. «España está bien posicionada pero necesita políticas efectivas y para que la inversión se anime tiene que haber certidumbre». Además, reclama que la administración «tiene que liderar, no solo con empresas sino también con los consumidores».

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Mario Picazo

Mario Picazo
METEORÓLOGO
«Tenemos que adaptar nuestra forma de vida». El meteorólogo y profesor universitario Mario Picazo abordó la evidencia en torno al cambio climático e innovaciones para combatirlo. «Tenemos que adaptarnos porque queremos salvar vidas y salvar economías». Picazo también describió los cambios y amenazas. «Tenemos temperaturas de agua tremendas en el Mediterráneo ya, entre tres y cinco grados por encima de la media. Es el mar que más se calienta en el mundo», dijo. «Los veranos cada vez serán más difíciles de llevar y cada vez hay más viajeros. Hay que cambiar de hábitos. Lo digo para que el sector turístico se adapte». Sin embargo, por encima de las políticas para adaptarse al cambio, Picazo cree que hay que poner el acento en las que buscan mitigar su impacto. «No tenemos años, no podemos estar esperando». Puso el acento en las políticas energéticas, en la movilidad y en las ciudades, que cada vez concentran a más población. «Podemos hacer que sean muy diferentes». Picazo puso sobre la mesa la última carta posible: la geoingeniería. Intentar cambiar el clima. «Hace años era ciencia ficción pero ahora es realidad». Puso como ejemplo experimentos para que las nubes reflejen más el sol y técnicas para intentar capturar CO2 y otros gases. Otro aspecto al que aludió es la digitalización que, por un lado debería poder ser un aliado para reducir el consumo contaminante pero que tiene otra cara: «Todos queremos IA pero el derroche energético es tremendo». La otra pata: «Tenemos que buscar la forma de gastar menos materia prima. No es infinita pero si no, no llegamos», concluyó.

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Diego Viu.

Diego Viu
DIRECTOR GENERAL DE ENERGÍA
«Lo estamos haciendo mal». El director general de Energía del Govern, Diego Viu, puso de manifiesto que Balears ha fracasado en los objetivos de penetración de las energías renovables. «Hay un problema de fondo, la conciencia con el territorio. Hay movimientos que han llegado a posicionarse en contra de todo», dijo en torno a la oposición que genera en las Islas la apertura de plantas solares» Necesitamos 4.500 megawatios y tenemos 400 más 300 de autoconsumo». En ese cálculo, apunta a que hay que emplear 3.150 hectáreas en las próximas décadas. «Es menos del uno por ciento de la superficie de Mallorca. ¿No somos capaces de acordar dónde?», se preguntó.

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Damià Gomis.

Damià Gomis
PROFESOR DE LA UIB
El director del Laboratorio Interdisciplinar sobre el Cambio Climático de la UIB, Damià Gomis, intervino en la mesa redonda que siguió a las ponencias. Recordó que en Balears la mayoría de emisiones provienen del transporte. «Tenemos que reducir las necesidades y las ansias. También nosotros somos turistas», señaló. Criticó que los planes actuales del Govern no contemplen las emisiones aéreas y marítimas. «Eso es hacerse trampas al solitario» y recordó que, si hay reticencia a las plantas solares deriva de que «el territorio ha sufrido muchas agresiones en Balears. Sin todo lo anterior no se vería como algo especulativo».